Una medida clave del endeudamiento mundial reanudó su ascenso en momentos en que la deuda global alcanzó un récord de 315 billones de dólares
Una medida clave del endeudamiento mundial reanudó su ascenso en momentos en que la deuda global alcanzó un récord de 315 billones de dólares en el primer trimestre del año, impulsada por las obligaciones en los mercados emergentes, Estados Unidos y Japón, mostró un estudio.
La relación deuda-producción global, una medida que describe la capacidad de un prestatario para pagar su deuda, aumentó hasta alcanzar 333% después de tres trimestres consecutivos de caída, dijo ayer el Instituto de Finanzas Internacionales (IIF, por sus siglas en inglés) en su informe trimestral Global Debt Monitor.
El cambio se produce cuando el valor en dólares de la deuda mundial aumentó en unos 1.3 billones de dólares trimestre a trimestre.
La deuda de los mercados emergentes alcanzó la cifra récord de más de 105 billones de dólares, con lo que se ha más que duplicado en la última década, según los datos del IIF.
Entre las economías emergentes que más contribuyeron a este aumento se ubican China, India y México. Corea del Sur, Tailandia y Brasil registraron los mayores descensos del valor en dólares de la deuda global entre el subgrupo, según los datos.
“Los déficits presupuestarios de los gobiernos continúan siendo superiores a los niveles anteriores a la pandemia de Covid-19 y se prevé que contribuyan en torno a 5.3 billones de dólares a la acumulación de deuda mundial este año”, señaló el IIF en un comunicado.
“El aumento de las fricciones comerciales y las tensiones geopolíticas también presentan importantes vientos en contra potenciales para los mercados de deuda”, advirtió el instituto.
Se esperaba que las tasas de interés comenzarían a bajar en Estados Unidos, pero la persistente inflación ha hecho que la Fed mantenga el rumbo y siga sin reducir el costo del crédito.
Esto se tradujo en un aumento de los costos de los préstamos en todo el mundo y, para muchos mercados emergentes, en un debilitamiento de las divisas que agrava aún más el costo del servicio de la deuda y “podría volver a poner en primer plano las tensiones sobre la deuda pública”, afirmó el IIF.
Egipto y Pakistán son vistas como las economías emergentes en las que el gasto por intereses de la deuda pública será más elevado hasta el 2026, con Pakistán destinado a gastar más de 50% de los ingresos en intereses y Egipto más de 60 por ciento.
Entre las economías desarrolladas, Estados Unidos y Japón fueron los países en los que la deuda aumentó más rápidamente, con 17 y 4 puntos porcentuales respectivamente.
Fuente: El Economista.
Por: Reuters.