La avena es uno de esos cereales conocidos por ser altamente saludable y por tener un montón de beneficios para nuestro organismo. Es por
La avena es uno de esos cereales conocidos por ser altamente saludable y por tener un montón de beneficios para nuestro organismo.
Es por eso que una práctica bastante común es cenar un poco de avena para obtener todas esas propiedades benéficas que puede aportar.
Sin embargo, ¿alguna vez te has preguntado qué puede pasarle a tu cuerpo si cenas avena todos los días? Aquí te contamos más sobre ello y te daremos algunos consejos para consumirla adecuadamente.
Propiedades de la avena
Como ya lo mencionamos, la avena tiene muchos beneficios que puedes aprovechar si la consumes de forma constante.
Por ejemplo, es una excelente fuente de fibra, aporta energía al organismo y está llena de minerales y vitaminas que pueden mejorar en gran medida tu salud.
Lo mejor de todo es que también resulta un alimento bastante versátil, así que se puede preparar tanto en recetas dulces como en recetas saladas.
¿Qué le pasa a tu cuerpo si cenas avena todos los días?
Al consumir avena por la noche, podemos encontrarnos con el gran beneficio de obtener una sensación de saciedad más fácilmente y consumiendo menos comida, ya que la avena te ayuda a sentirte satisfecho y puede ser un gran alimento auxiliar para controlar el peso y evitar caer en los atracones de comida.
Sin embargo, consumir avena por la noche también puede resultar contraproducente, ya que recordemos que puede aportar ciertos niveles de energía al cuerpo, lo que va a dificultar tu descanso.
Del mismo modo, consumir avena antes de dormir puede llegar a alentar tu digestión y provocar molestias durante las últimas horas del día, sobre todo si estás intentando conciliar el sueño.
Recordemos también que comer avena en exceso puede llegar a provocar algunos problemas de salud, como el aumento de peso debido al exceso de carbohidratos, inflamación, gases y otros problemas estomacales.
Recomendaciones
Por eso, es muy importante consumir avena de forma responsable y adecuada. Aunque lo ideal es consumirla por la mañana para aprovechar al máximo todos sus beneficios, si vas a integrarla en tu cena, procura hacerlo acompañada de otros alimentos ligeros y que favorezcan tu digestión.
Además, recuerda que es necesario consumirla considerando una dieta balanceada que también incluya otros grupos alimenticios, como las frutas y las verduras.
Fuente: Infobae.
Por: Rafael Maldonado.