Cuidar la salud bucal no solo implica cepillarse los dientes y visitar al dentista regularmente. La alimentación juega un papel importante e
Cuidar la salud bucal no solo implica cepillarse los dientes y visitar al dentista regularmente. La alimentación juega un papel importante en la protección del esmalte dental, y algunas bebidas pueden ocasionar el deterioro sin que muchas personas lo noten.
Aunque parezcan inofensivos, ciertos líquidos favorecen la erosión dental y el desarrollo de caries debido a su alto contenido de azúcar y acidez.
El consumo frecuente de productos ultraprocesados y con grandes cantidades de endulzantes ha sido señalado como uno de los principales factores que afectan la salud de los dientes. Cuando el esmalte se desgasta, los dientes quedan expuestos a bacterias que provocan sensibilidad y problemas más graves a largo plazo.
Entre todas las bebidas que pueden dañar la dentadura, los jugos de frutas con azúcar añadida destacan como uno de los principales responsables.
Su acidez natural, combinada con los azúcares extras que incluyen muchas marcas comerciales, debilita el esmalte y favorece la aparición de caries.
Los jugos de frutas con azúcar añadida son un factor de riesgo para la salud bucal. Foto: Pexels
¿Cómo afectan los jugos de frutas con azúcar añadida a los dientes?
Los jugos de frutas son percibidos como una alternativa saludable a los refrescos, pero muchas versiones envasadas contienen cantidades excesivas de azúcar y conservadores.
Aunque las frutas en su estado natural aportan vitaminas y antioxidantes, al convertirlas en jugo se pierden algunas de sus propiedades, y al agregar azúcar, el impacto en la salud bucal puede ser considerable.
El ácido cítrico presente en frutas como la naranja, el limón y la piña contribuye a la erosión del esmalte dental. Al combinarse con azúcares añadidos, crea un entorno ideal para el crecimiento de bacterias que generan caries y otras enfermedades bucales, afectando la salud de tus dientes.
Además, al tratarse de líquidos, estos jugos pueden impregnar toda la superficie dental con facilidad, prolongando el contacto con el esmalte y acelerando su desgaste. El problema se agrava cuando el consumo es constante y no se toman medidas para reducir su impacto.
Las bebidas azucaras afectan los dientes. Foto: Pexels.
Consejos para reducir el daño en los dientes
Evitar por completo los jugos de frutas no siempre es una opción viable, pero sí existen formas de reducir su impacto en la salud dental:
1-Optar por jugos naturales sin azúcar añadida. Prepararlos en casa permite controlar su contenido y evitar el exceso de edulcorantes.
2-Beber con popote. Usar una pajilla reduce el contacto directo del líquido con los dientes, minimizando su efecto erosivo.
3-No cepillar los dientes inmediatamente. Después de consumir jugos ácidos, espere al menos 30 minutos antes de cepillarse para evitar debilitar aún más el esmalte.
4-Enjuagar la boca con agua. Beber agua después de ingerir jugos ayuda a eliminar los residuos ácidos de la superficie dental.
5-Consumir frutas enteras en lugar de jugo. Al comer la fruta completa, se obtiene fibra y otros nutrientes que benefician la salud sin dañar los dientes.
Fuente: Gastrolab.
Por: Karen Salgado.
