Cuidar la salud visual no solo depende de utilizar los lentes adecuados o evitar la exposición prolongada a las pantallas; también es posibl
Cuidar la salud visual no solo depende de utilizar los lentes adecuados o evitar la exposición prolongada a las pantallas; también es posible fortalecer tu vista a través de una alimentación balanceada y saludable.
Incluir ciertos alimentos ricos en nutrientes puede llegar a ser una gran diferencia en la prevención de enfermedades oculares, y por eso te hablaremos de algunos elementos que puedes incluir en tu dieta para cuidar tus ojos.
Nutrientes como la vitamina A, C, E, el zinc y carotenoides como la luteína y la zeaxantina son esenciales si buscamos el buen funcionamiento de los ojos. Estos elementos nos ayudan a proteger la retina, mejorar la visión nocturna y reducir el riesgo de padecimientos como la degeneración macular o las cataratas. Aquí te hablaremos de alimentos que pueden brindarte estos nutrientes.
Muchos de estos alimentos están al alcance de todos y son bastante económicos. Además, se pueden incluir fácilmente en platillos cotidianos. Así puedes lograr una dieta balanceada, rica en antioxidantes, vitaminas y minerales que te ayudarán a cuidar fácilmente de tu salud ocular sin tener que gastar mucho dinero o incorporar alimentos difíciles en tu alimentación.
Existen muchas formas de integrar estos alimentos a tu dieta. Foto: Pexels / Suzy Hazelwood.
Zanahoria
Este es uno de los alimentos más populares cuando se trata de cuidar la salud visual. Y es que su aporte de betacarotenos, que el cuerpo convertirá en vitamina A, es esencial para mantener la retina en buen estado y prevenir problemas como la ceguera nocturna. Lo mejor de todo es que la zanahoria es muy versátil: puedes comerla cruda o cocida en un sinfín de platillos.
Espinaca
Las espinacas contienen luteína y zeaxantina, ambos antioxidantes que protegen los ojos de los daños provocados por la luz ultravioleta. Además, si la consumes frecuentemente, es posible que disminuyas el riesgo de cataratas con el paso del tiempo. Procura consumirlas frescas o con una cocción mínima, procurando siempre lavarlas y desinfectarlas muy bien antes de comerlas.
Pescados azules
Las variedades de pescado como el salmón, las sardinas o el atún son conocidas como pescados azules y son ricos en ácidos grasos Omega-3, que contribuyen a mantener la película lagrimal y prevenir el síndrome de ojo seco, sobre todo en personas que pasan mucho tiempo frente a pantallas. Así que, si tu trabajo o escuela te obliga a usar dispositivos electrónicos constantemente, no olvides incluir pescados en tu alimentación.
Huevo
El huevo, especialmente la yema, puede aportar nutrientes como la luteína, la zeaxantina, el zinc y la vitamina A. Esto lo convierte en un alimento bastante completo para cuidar nuestra salud visual. Además, es muy fácil de incorporar en desayunos o comidas rápidas, por eso es que suele ser un alimento bastante común en la alimentación diaria.
Fuente: Gastrolab.
Por: Rafael Maldonado.
