La confianza de las pequeñas empresas estadounidenses alcanzó en julio su nivel más alto en casi dos años y medio, otro indicio de que los tem
La confianza de las pequeñas empresas estadounidenses alcanzó en julio su nivel más alto en casi dos años y medio, otro indicio de que los temores de los mercados financieros a una recesión tras el aumento de la tasa de desempleo el mes pasado son probablemente exagerados.
La Federación Nacional de Empresas Independientes (NFIB, por su sigla en inglés) informó ayer que su Índice de Optimismo de las Pequeñas Empresas subió 2.2 puntos a 93.7 el mes pasado, la lectura más alta desde febrero del 2022.
Aunque las empresas siguieron preocupadas por la inflación, fueron menos las que declararon haber aumentado la remuneración de los trabajadores y los precios medios de venta. Esto es un buen augurio para las perspectivas de inflación.
El informe se unió a una encuesta realizada la semana pasada por el Instituto de Gestión de Suministros, que mostró un repunte de su índice de gestores de compras (PMI) no manufacturero, lo que alivió la preocupación de que la economía estuviera en recesión o en la cúspide de una, desencadenada por el aumento de la tasa de desempleo, que en julio se situó en 4.3%, su nivel más alto en tres años.
De los propietarios, 25% declaró que la inflación es el problema más importante para el funcionamiento de su empresa, cuatro puntos más que en junio. Ello, junto con la incertidumbre política ante las elecciones presidenciales de noviembre, contribuyó a mantener el índice de la NFIB por debajo de la media de 98 puntos en 50 años por 31º mes consecutivo.
No obstante, el panorama inflacionario está mejorando ya que 33% neto de los propietarios declaró haber aumentado la remuneración de sus empleados; se trata de la cifra más baja desde abril del 2021 y supone un descenso de 5 puntos con respecto a junio.
Fuente: El Economista.
Por: Reuters.
