¿Cuántas veces te ha pasado que comparas tu cuerpo con el de otras personas? Estas personas pueden ir desde figuras públicas como súper mode
¿Cuántas veces te ha pasado que comparas tu cuerpo con el de otras personas? Estas personas pueden ir desde figuras públicas como súper modelos hasta familiares o amigos; y puede deberse a que se busca la aceptación corporal en los estándares de belleza.
Sin embargo, algo que no terminamos de comprender como sociedad, es que los estándares son “modas” y estos van cambiando década con década, al punto de que pueden ser algo extremistas; por ejemplo, a inicios de los 2000’s el cuerpo aceptado era sumamente delgado y para el 2010 el estándar era un cuerpo al estilo “Kardashian” con caderas y curvas prominentes, pero un abdomen plano.
Debemos comenzar a aceptar que existe una gran diversidad de cuerpos y cada uno de ellos se comporta de manera diferente, por lo que deben ser entendidos y así construir la mejor versión de este sea cual sea su forma o tamaño, sin intentar amoldarlo al estándar de belleza actual.
¿Cómo puedo conocer mi tipo de cuerpo?
Existen los llamados somatotipos, que son categorías en las que se clasifica a su cuerpo según su forma.
Los somatotipos se clasifican en:
1. Ectomorfo: Son personas delgadas y altas, que no tienden ni a acumular grasa ni a desarrollar músculo. Su metabolismo es muy rápido.
2. Mesomorfo: Los más equilibrados, son musculosos y de complexión robusta. Su metabolismo es lo que consideramos de ritmo normal.
3. Endomorfo: Son personas que tienen tendencia a acumular grasa, su cuerpo suele ser más redondeado, tienen un metabolismo lento.
Lo importante a entender aquí es que existen matices y no podemos encasillar a los cuerpos, debido a que este pasa por diversos cambios a lo largo del tiempo, además influyen factores como la raza y los genes.
Si te interesa conocer más del tema, te recomendamos escuchar este episodio de Punto Saludable, donde Ximena Tena habla sobre la diversidad corporal.
Recuerda que cada cuerpo se comporta de manera diferente y que todos pasan por procesos en los que este cambia. Aprendiendo a entender tu cuerpo, podrás amarlo y construir su mejor versión para mantenerlo saludable.
Fuente y redacción: Gastrolab.
