SIOUX CITY, Iowa ( KCAU )– Un veterano local de la Guerra de Corea de Sioux City viajó al extranjero para ser un experto en todos los oficios cuando tenía poco más de 20 años, y mientras estaba en la guerra recibió un recuerdo que solo obtuvieron un puñado de veteranos que conoció.

“Yo estaba en la reserva de la marina y me sacaron de la reserva de la marina para incorporarme a la infantería y entré en el ejército”, dijo Frank Curry, un veterano de la Guerra de Corea.

En agosto de 1951, Frank Curry fue enviado al extranjero, a Corea, donde pasó 8 meses en el valle de Kumhwa y otros 3 meses en Heart Break Ridge.

“Yo era un poco de todo; Manejo las radios, manejo la centralita, y a veces estaba tendiendo alambre de púas, minas terrestres, llevaba munición para la ametralladora, y hasta soldado de infantería, y en ocasiones cargaba algunos muertos y eso es lo que realmente duele, ” dijo Curry.

Mientras estaban en guerra, Curry y sus compañeros soldados hicieron todo lo posible para divertirse a pesar de las circunstancias. Sin embargo, Curry puede describir su experiencia en tres palabras.

“Corea era un infierno, cualquier guerra es un infierno. Estábamos tomando esta colina 1062 y muchos de los bosques fueron golpeados y tuve que cargar algunos de ellos de regreso. A veces estábamos tan lejos de nuestra línea principal, de la ayuda y de los medicamentos, que iban a morir antes de recibir ayuda, estábamos tan lejos. Esa es otra cosa para la que no estábamos realmente planeados”, dijo Curry.

Durante su estadía en Corea, Curry recibió un recuerdo y, según dice, solo conoció a un puñado de veteranos que también lo tienen.

“Los chinos, en la época navideña de 1951, vinieron y colgaron medias en nuestro alambre de púas y dentro había un pañuelo que tengo del ejército de la República China y había un pequeño alfiler que decía paloma de la paz y una tarjeta de Navidad”, dijo Curry.

Según el Museo Imperial de la Guerra, el pañuelo de “propaganda” fue escrito y entregado por los ‘Voluntarios del Pueblo Chino’ y fue uno de los muchos intentos de utilizar la guerra psicológica contra los soldados surcoreanos y especialmente contra sus aliados. Muchos de los pañuelos tenían frases como “Aquellos que te aman te quieren de regreso a casa, sanos y salvos” y “No es una vergüenza abandonar una guerra injusta” con ilustraciones en las esquinas.

Cerca del final de la gira de Curry, estuvo destinado en Japón para practicar desembarcos anfibios, que es una operación utilizada para llevar tropas a la costa. Después de terminar su servicio a la edad de 22 años, Curry trabajó en una ferretería antes de unirse a la policía de Sioux City, donde sirvió a la comunidad hasta su jubilación en 1985.

Fuente: Siouxland Proud.

Por: Tyler Euchner.